divendres, 6 de maig del 2011

La belleza de un error

Leo una frase en Twitter de Paulo Coelho: "Si no cometes errores, es que no haces nada". ¿Quien no se ha equivocado nunca? Nadie, porque sólo por el hecho de vivir la vida ya conlleva hacer cosas bien y cosas mal. Algunos errores serán más graves que otros. Y también los aciertos, claro. Unos errores serán tan pequeños que puede que no nos demos ni cuenta. Otros serán garrafales, y puede que nos quede en la memoria durante mucho tiempo. Objetivamente, puede también que pensemos que un error es un acierto, y puede que pensemos que un acierto es un error. Subjetivamente, podemos pensar que nos hemos equivocado y otra gente piense que has hecho lo correcto. Y al revés, que pensemos que hemos acertado y que otra gente piense que hemos errado.

Acompaño siempre a mi esposa en sus actuaciones como cantante en un grupo de música de baile. Hoy en día, hay que decir que con los teclados modernos, puedes llevar la música grabada y sólo tienes que cantar. Esto ha representado una explosión del intrusismo profesional que afecta a los músicos de toda la vida, los que tocan instrumentos de verdad, con sus partituras. Se presentan uno o dos personas que tienen de músico lo mismo que los bancos de generosos, o los políticos de sinceros, y sin dificultad alguna te "tocan" la Novena Sinfonía de Beethoven.

Podrán poner toda la música que quieran, nunca se equivocarán, pero será música sin alma. Los músicos de verdad, los que han tocado un instrumento toda su vida, le sacarán un sonido especial con su talento para la música. A veces se equivocarán, pero que error más bonito...

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